La hacienda «La Finquita» en Mijas es un excelente ejemplo de la fusión entre la arquitectura tradicional andaluza y un enfoque contemporáneo en el diseño. Su uso de materiales locales, como la piedra y la cerámica, no solo respeta el contexto histórico de la región, sino que también refleja una conexión profunda con la cultura local.

La disposición de los espacios exteriores e interiores resalta la importancia de la luz natural y la ventilación, características esenciales en la arquitectura mediterránea. Los patios centrales y las terrazas ofrecen un diálogo fluido entre el interior y el exterior, creando un ambiente acogedor que invita a disfrutar del paisaje circundante.

Además, el diseño paisajístico complementa la estructura, integrando jardines y zonas verdes que aportan un aire de tranquilidad y armonía. En resumen, «La Finquita» no solo es un refugio estético, sino que también se presenta como un modelo de sostenibilidad y respeto por el entorno natural y cultural de Mijas.